Por desgracia y no es la primera vez no será posiblemente la última, el deporte se ve envuelto irremediablemente en una dinámica paralela a la política de algunos países. Albania, que en los últimos tiempo viene soportando un régimen político bastante peculiar y, desde luego, polémico, se queda fuera del Mundial 2010 y ni tan siquiera pertenece a la FIFA desde ya.
El máximo organismo del fútbol mundial decidió en su Comisión de Asociaciones, suspender de afiliación a la Federación Albanesa por "fuertes injerencias políticas", ya que "el Ministerio del Deporte de Albania ha amenazado continuamente con privar a la Federación albanesa de su independencia y el ministro del Deporte ha hecho graves acusaciones contra el presidente de la asociación".
Es cierto que el presidente de su Federación, Armand Duka, viene siendo perseguido y amenazado, lo que no tolera la FIFA, que tras pedir pruebas a la Federación, jamás recibió respuestas, con lo que el organismo actuó: "Los estatutos de la asociación no han sido registrados debido a la oposición de dicho ministerio, al cual se le dio un ultimátum para que pusiera freno a su interferencia política y permitiera el registro de los estatutos antes del 21 de febrero". Ante esto, Albania no hizo observaciones, dejó pasar el tiempo y no solucionó una refriega que les amenazaba frontalmente hasta consumarse la descalificación.
Así, la FIFA decidió suspenderla y dejar como nula su clasificación en el Grupo 1 para el Mundial, donde estaba emparejada con Portugal, Suecia, Dinamarca, Hungría y Malta.
Como siempre, por la misma e interminable desgracia de quien maneja estos asuntos, el principal perjudicado es el aficionado de calle que no podrá disfrutar o simplemente animar a su selección. Albania se queda sin fútbol.
El máximo organismo del fútbol mundial decidió en su Comisión de Asociaciones, suspender de afiliación a la Federación Albanesa por "fuertes injerencias políticas", ya que "el Ministerio del Deporte de Albania ha amenazado continuamente con privar a la Federación albanesa de su independencia y el ministro del Deporte ha hecho graves acusaciones contra el presidente de la asociación".
Es cierto que el presidente de su Federación, Armand Duka, viene siendo perseguido y amenazado, lo que no tolera la FIFA, que tras pedir pruebas a la Federación, jamás recibió respuestas, con lo que el organismo actuó: "Los estatutos de la asociación no han sido registrados debido a la oposición de dicho ministerio, al cual se le dio un ultimátum para que pusiera freno a su interferencia política y permitiera el registro de los estatutos antes del 21 de febrero". Ante esto, Albania no hizo observaciones, dejó pasar el tiempo y no solucionó una refriega que les amenazaba frontalmente hasta consumarse la descalificación.
Así, la FIFA decidió suspenderla y dejar como nula su clasificación en el Grupo 1 para el Mundial, donde estaba emparejada con Portugal, Suecia, Dinamarca, Hungría y Malta.
Como siempre, por la misma e interminable desgracia de quien maneja estos asuntos, el principal perjudicado es el aficionado de calle que no podrá disfrutar o simplemente animar a su selección. Albania se queda sin fútbol.
0 comentarios:
Publicar un comentario